Un total de doce equipos de toda España (dos de ellos pertenecientes a la Universidad de Málaga), se reunieron este pasado fin de semana en el ZooAquarium de Madrid. Programadores, diseñadores web, diseñadores gráficos, codificadores, biólogos, matemáticos e ingenieros trabajaron juntos con la pretensión de idear y crear soluciones tecnológicas que ayuden a resolver problemas relacionados con el furtivismo de especies de fauna y flora silvestres.

El objetivo de la iniciativa es evitar la captura y la venta ilegal de dichas especies, sus partes o derivados y, de esta manera, proteger la biodiversidad a nivel mundial, interceptando su tráfico y haciendo partícipe a la sociedad en su lucha.

‘Earthgine’ fue el equipo ganador, gracias al proyecto HYPOCHIP, un dispositivo de identificación y seguimiento de animales cautivos en núcleos zoológicos, cuya finalidad es trazar el camino de los animales de núcleo en núcleo, evitando así el tráfico ilegal de animales cautivos.

Earthgine está formado por dos estudiantes de Biología, Irene García y Soledad Molina; un alumno de ingeniería informática, Ángel Martín; y un estudiante de Ingeniería Electrónica Industrial, Álvaro Ávila-Casanova. Todos ellos se alzaron con el primer premio, consistente en el cobro de 2.500 euros en metálico y la posibilidad de competir en la final mundial.

La embajada de Estados Unidos en España, el Ministerio para la Transición Ecológica, el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil, la Fundación Parques Reunidos y el Zoo Aquarium de Madrid, en colaboración con otras entidades, fueron los encargados de poner en marcha esta importante cita tecnológicam celebrada en España por primera vez. Este evento forma parte de las actuaciones previstas en el ‘Plan de Acción español contra el tráfico ilegal y el furtivismo internacional de especies silvestres’ (Plan TIFIES).