Un año más un equipo de la Universidad de Málaga, encabezado por el profesor de la Facultad de Medicina, Carlos Vara y compuesto por seis médicos se desplazará este verano a una de las zonas más desfavorecidas de Bolivia para cubrir sanitariamente a su población. Esta labor se lleva a cabo en el Hospital Virgen Milagrosa de la Fundación Hombres Nuevos, que preside el padre Nicolás Castellanos, obispo emérito de Palencia y Premio Príncipe de Asturias.

El hospital, que está localizado en el barrio más pobre de la ciudad, donde viven hacinadas más de 300.000 personas, cuenta con unas magníficas instalaciones, gracias a la colaboración y ayuda que ha prestado al proyecto el Ayuntamiento de Málaga, la Caixa y la ayuda anónima de particulares.

La Fundación Hombres Nuevos y la UMA firmaron en su día un convenio de cooperación, gracias al cual se pueden realizar dichas campañas, en las que participan profesores y alumnos de tercer ciclo y de últimos cursos de grado de  la Universidad de Málaga.

Para todos los integrantes de esta expedición es un reto muy gratificante, pues como señala el doctor Carlos Vara, “con nuestra ayuda salen adelante personas, que de no ser atendidas morirían”.

La escasez de medios de la zona, así como la beneficencia y privacidad de la medicina hacen que muchas de las enfermedades que se detectan estén muy evolucionadas. Así, una simple diarrea o una neumonía acaban muchas veces con la muerte. No obstante, en este entorno también se dan lesiones atípicas difíciles de encontrar fuera de él, como lesiones tuberculosas, hernias gigantes o bocios que pesan 1,5 kilos

Por todo ello,  los habitantes del lugar esperan durante todo el año la llegada de estos voluntarios, ya que durante el invierno el personal de la Fundación Hombres Nuevos se encarga de difundir la labor médica y cuando el grupo llega, ya tiene a los enfermos preparados para ser examinados, o en su caso, intervenidos.