A muchos les parecerá que no es posible, que no ha pasado tanto tiempo. Es normal. A mí también me cuesta creer que llevemos diez años "sacando" esta revista, apareciendo todos los meses de cada curso sin faltar ni una sola vez. Pero es verdad, este es el décimo curso que nos presentamos a todos vosotros, y de ahí la portada de conmemoración que nos va a acompañar durante todo el primer cuatrimestre. En la figura de la portada aparecen copias de ejemplares de los nueve años anteriores de tal manera que se puede apreciar también la evolución en el aspecto externo de la revista. Durante todo este tiempo la revista se ha ido consolidando como algo propio de esta Facultad, algo que esperamos todos los meses, que coleccionamos y que apreciamos. Esto se vive desde el comité editorial como uno de nuestros mayores logros como editores, el aprecio que se le tiene a la revista. Nos la piden desde muchas partes; colegios, centros de secundaria, bibliotecas y particulares quieren tener la colección completa. Y nosotros no podemos atender todas las peticiones, simplemente porque la edición impresa de la revista se agota nada más ponerse en circulación. Para ser sinceros, alguna que otra vez nos hemos preguntado qué pasaría si hubiera que pagar para conseguirla. Pero no es este el caso. Mientras podamos, y en esto hay que ser claros, mientras consigamos que se mantenga el apoyo que desde hace años recibimos del Vicerrectorado de Investigación y Desarrollo Tecnológico de la UMA, la revista se seguirá repartiendo como hasta ahora. Después de tantos años debe de haber quedado claro que esto no es una aventura editorial para competir por un mercado más o menos fácil entre nuestros estudiantes. A todo esto se añade que la versión electrónica de la revista tiene una aceptación muy considerable, es consultada asiduamente, y los elogios hacia ella no paran de aumentar.

Los principios que rigieron la aparición de la revista siguen siendo los mismos, considerarla como un instrumento más de la enseñanza que se ofrece en esta Facultad de Ciencias. Este sentido pedagógico es el que nos hace dedicarle los esfuerzos que requiere cualquier tipo de enseñanza al nivel que sea. Con el tiempo todo se convierte en algo tan cotidiano que a veces parece que las cosas se hacen solas, pero lo cierto es que cada vez cuesta más trabajo seleccionar artículos que respondan al interés de todos vosotros y a la calidad que, también desde el principio, decidimos que debía tener la publicación. Ahora no es infrecuente que tengamos que rechazar, por distintos motivos, artículos que nos mandan desde distintas partes de España y Latinoamérica. Y esto es un síntoma para cualquier publicación de que está alcanzando unos niveles deseables de calidad (no olvidemos que no se trata de una publicación científica en la que se presentan artículos originales de investigación, sino de una publicación pedagógica).

Ninguna revista se hace si no hay autores que quieran contribuir con sus artículos. Y en esto hemos tenido una suerte inmensa. Nunca han faltado compañeros que han querido colaborar. Desde luego yo tengo claro que sin ellos no hubiéramos podido mantener mucho tiempo la publicación. El mérito por tanto de cumplir estos "primeros" diez años es de todos y cada uno de los que han escrito artículos, de los que los han corregido, y de los que los habéis leido.

Sería injusto no hacer mención a otro elemento importante en esta historia, los impresores. Aunque los primeros años la revista estaba hecha a base de fotocopias, pronto nos dimos cuenta de que si queríamos calidad había que ir en busca de una imprenta. Es así como surgió nuestra relación con Imagraf que desde ese momento se encargó de la impresión. La relación entre editores e impresores no siempre es fácil, para los primeros su publicación es lo más importante, los segundos tienen que sufrir precisamente que cada cliente cree que lo suyo es prioritario. Y siempre con prisas. Y sin margen de error. Hoy debo decir que mi relación con los impresores de esta revista ha sido muy buena y que la calidad de impresión de la revista es inmejorable si tenemos en cuenta el precio que cobran. Por supuesto que con más dinero se pueden hacer las cosas mejor, impresión a todo color en todas las páginas, cambios de portada en cada número, etc. Pero es difícil pensar que con el dinero que disponemos se pueda mejorar la calidad del producto impreso. Por tanto, nuestro agradecimiento y reconocimiento a la empresa impresora.

Solo me queda hablar de futuro. Mi idea es fácil de exponer. Hay cosas que merece la pena mantener aunque conlleve esfuerzo. Y hay cosas que consiguen tener vida propia. Creo que este es el caso de esta revista. Así que si alguna vez, alguno de nosotros, los editores de esta revista, fallamos, ya llegarán otros que quieran mantener esta singular experiencia educativa de la Universidad de Málaga. Es ley de vida, y serán bienvenidos.

Gracias a todos. Feliz cumpleaños.

Salvador Guirado es Profesor Titular de Biología Animal en la UMA y Editor de Encuentros en la Biología