La Academia Malagueña de Ciencias y su biblioteca, actualmente ubicada en el edificio de Biblioteca General

Datos Históricos de la Sociedad Malagueña de Ciencias y su Biblioteca
Luis Linares Girela
(Bibliotecario de la AMC)

1.-De la Sociedad Malagueña de Ciencias Físicas y Naturales a la Academia Malagueña de Ciencias.

El 24 de julio de 1872, una veintena de malagueños, convocados por Domingo de Orueta y Aguirre, celebran una reunión preparatoria para crear la que poco más tarde (6-10-1872) se constituiría formalmente como Sociedad Malagueña de Ciencias Físicas y Naturales (SMCFN). La fundación se produce dentro del periodo de la historia de España denominado como el “sexenio revolucionario”, que precedió a la restauración monárquica de 1874. Málaga atravesaba en esos años un declive económico provocado por el cierre de sus industrias siderúrgicas que se había iniciado en 1865 y por la decadencia del sector agrícola debido fundamentalmente al hundimiento de los mercados del vino y la pasa.

La SMCFN se planteaba con la finalidad de fomentar el estudio de las ciencias y de contribuir, por medio de ellas, a solucionar la crisis malagueña de aquellos años. Desde el primer momento de su creación, programó charlas y conferencias de divulgación e intervino muy activamente en el diagnóstico y propuesta de actuaciones frente a los numerosos problemas surgidos en la provincia a lo largo del último cuarto del siglo XIX: las crisis agrícolas debidas a la plaga de la filoxera y a la parasitosis de los cítricos, las epidemias de viruela y triquinosis, los terremotos de 1884-1885, por citar los más importantes de este periodo.

A partir de 1909 cambió su denominación por la más genérica de Sociedad Malagueña de Ciencias (SMC), manteniéndose ésta hasta que se transformó en Academia Malagueña de Ciencias (AMC) por el Decreto 102 de 12 de marzo de 2002 del Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía, en el que se mantiene la fecha fundacional de 1872. En la actualidad se halla integrada en el Instituto de Academias de Andalucía y asociada al Instituto de España.

Desde su fundación ha mantenido las líneas de actuación tradicionales, celebrando sesiones, debates, jornadas y conferencias científicas en las que participan, además de sus propios socios, personalidades y científicos de prestigio ajenos a la Corporación. La tradición de ofrecer soluciones a los problemas de Málaga se mantiene en la actualidad mediante la elaboración de informes y dictámenes científicos, entre los que cabe mencionar los más recientes relativos a la sequía, a los efectos de los temporales en el litoral, al proyecto de túnel bajo el Paseo de los Curas, a la creación de un museo de la ciencia y la tecnología, a los problemas del agua en la provincia o a la remodelación del Parque, entre otros. En la actualidad, el presidente de la Academia lo es también del jurado que concede anualmente el prestigioso “Premio Málaga de Investigación” en su modalidad de Ciencias.

La actividad científica y corporativa se desarrolla a través de cuatro secciones (Ciencias Biosanitarias, Ciencias Matemáticas, Físicas y Naturales, Ciencias Sociales y Humanidades y Ciencias Tecnológicas) en las que se integran los 50 académicos de número preceptivos y los de mérito, cuyo número en estos momentos es de 33. En la actualidad, los académicos de honor son 3 y 20 los correspondientes en localidades ajenas a la provincia de Málaga.

La difusión de las actividades de la Corporación se ha llevado a cabo tradicionalmente por medio de un Boletín que históricamente ha tenido diversas denominaciones (Actas, Boletin, Anales, “Andalucía Científica”). En la actualidad se publica, con periodicidad anual, un anuario y el Boletín de la Academia Malagueña de Ciencias, que incluye el detalle de las actividades realizadas en el periodo, el texto de las conferencias que se celebran, comunicaciones científicas (en su mayor parte de los propios socios), así como los dictámenes e informes emitidos.

En virtud del convenio suscrito con la Universidad de Málaga el 7-8-1973 la sede oficial de la Corporación se estableció en la sala de la Biblioteca General de la Universidad de Málaga (UMA) que lleva su nombre, donde se encuentra depositado el fondo bibliográfico de la Academia. Desde 2006, se dispone además de una sede administrativa en un inmueble del centro histórico de Málaga, cedido por el Ecxmo. Ayuntamiento de la ciudad, donde se llevan a cabo las actividades cotidianas de secretaría y administración, atención al público y a los socios, reuniones de la junta de gobierno y de las secciones, recepción de correspondencia, etc. Existe también una página web oficial para información y difusión de la Academia y sus actividades. (www.academiamalaguenadeciencias.com).


2.-La Biblioteca y el fondo bibliográfico de la Academia Malagueña de Ciencias.

Los libros de actas, archivos y boletines de la Sociedad, así como varios trabajos de investigación realizados sobre el tema, permiten reconstruir la historia de la Biblioteca y del singular fondo bibliográfico de la SMC, que ha sido calificado por los investigadores que lo han estudiado como la mejor colección de textos histórico-científicos que posee nuestra ciudad.

A poco más de un año de su fundación, la SMC acordó crear la Biblioteca (29-11-1873) que, en principio, habría de nutrirse de los donativos de sus socios. En 1875 contaba con unos 500 volúmenes; en 1902 se llegó al número de 1.500 y a principios de 1916 disponía ya de 3.000 volúmenes. En los estatutos de 1965, al referirse al patrimonio de la SMC, se dice que el patrimonio de la SMC está constituido por una Biblioteca de 10.000 volúmenes de un valor material indeterminado y en la correspondencia cruzada entre la UMA y la SMC, en 1972, se hace referencia a la biblioteca de 12.000 volúmenes que a lo largo de su historia ha reunido esa benemérita Sociedad.

Hay constancia documental de donaciones, legados y adquisiciones de colecciones de los socios Sres. Clemens, Luis Souvirón, Manuel Casado, Pablo Prolongo, Enrique Laza, Domingo de Orueta (padre e hijo), Juan Bolín (para la que hubo que ampliar la biblioteca), Eduardo J. Navarro, José Rodríguez-Spiteri, Sofía Valle, entre otros, en los primeros años. A ellos hay que añadir, en el periodo más reciente, los legados de Francisco Vázquez Shell y Joaquín Bermúdez Polonio.

La Biblioteca estuvo desde el principio ubicada en unas dependencias de los locales propiedad de la SMC en la calle Rodríguez Rubí (junto a la Plaza de la Constitución). Las actas de la Corporación reflejan la notable actividad y el elevado índice de uso de estas dependencias, en particular a lo largo de la primera mitad del pasado siglo, así como algunos avatares que hubo de sufrir la colección bibliográfica en el periodo de nuestra guerra civil y años inmediatamente posteriores (extravío de libros, depuración y censura eclesiástica, son términos que aparecen en las actas en sutiles pero ilustrativas reseñas al respecto). Así mismo, la colección sufrió, en varias ocasiones, deterioros derivados de las lluvias y del mal estado del edificio.

La creación de la UMA, en cuyo proceso la SMC participó de forma activa y generosa, llevó a la firma de un convenio entre ambas instituciones (7-8-1973), en cuyo preámbulo se establecía que los fondos bibliográficos de la Biblioteca de la Sociedad Malagueña de Ciencias podrían constituir la base sobre la que puede fundarse la nueva Biblioteca General de la Universidad de Málaga y que en atención a ello la Sociedad Malagueña de Ciencias entrega en depósito toda su biblioteca, ficheros y enseres de la misma al Rectorado…. Por su parte la UMA se comprometía a instalar adecuadamente los fondos entregados en depósito, a llevar a cabo los trabajos de limpieza, encuadernación e identificación necesarios, a instalar una placa con referencia a la SMC en el lugar donde se custodien dichos fondos y a reservar, en el edificio de la Biblioteca General, el lugar que se estime oportuno para la SMC. El convenio fue ratificado 30 años más tarde (28-3-2003) en términos similares, una vez creada la Academia Malagueña de Ciencias, puntualizando que el fondo bibliográfico deberá estar siempre formando una sola unidad, que periódicamente la AMC entregará a la UMA los distintos fondos que se vayan generando y que anualmente se levantará inventario del fondo cedido en depósito por los bibliotecarios de la Universidad y de la AMC.

Las labores de ordenación, limpieza y catálogo llevadas a cabo por la UMA en cumplimiento de los convenios aludidos se produjeron en diversas etapas, y dieron lugar a varias publicaciones de los investigadores que intervinieron en ellas, entre las que cabe mencionar las que tienen por autores a J.L. Carrillo, M.D. Ramos y J. Castellanos (1984): La Sociedad Malagueña de Ciencias. Catálogo de sus manuscritos; I. Jiménez, M.J. Ruiz y P. Gardeta (1992): Catálogo de las publicaciones periódicas de la Sociedad Malagueña de Ciencias. Así mismo, en mayo de 1995 la UMA llevó a cabo una exposición sobre los Fondos bibliográficos de la SMC, publicando un catálogo en el que, aparte de la descripción del material expuesto, se incluyeron datos históricos y referencias de la colección.

Tras haber pasado por distintos emplazamientos desde que fueron cedidos a la UMA, la mayor parte de los fondos bibliográficos de la AMC se encuentran actualmente depositados y custodiados en una sala especial la Biblioteca General de la UMA del Campus de Teatinos, en la que una placa los identifica. Los volúmenes publicados antes de 1800 se hallan en dependencias de la Biblioteca General, donde están sometidos a especiales condiciones de seguridad y conservación. Otra pequeña parte de estos fondos se encuentran en diferentes departamentos universitarios sin que hayan sido aún integrados en el catálogo del fondo de la AMC. Finalmente, un número indeterminado de publicaciones del fondo original se encuentra en paradero desconocido; de ellas sólo existen las fichas manuales incluidas en el fichero originario, que también se conserva. Es una vieja aspiración y un firme propósito de la AMC recuperar los volúmenes que se conservan en lugares distintos a la Biblioteca General, para su catalogación y depósito en el lugar que establece el convenio con la UMA.

La ordenación y catalogación llevada a cabo en cumplimiento de los convenios aludidos permitió poner de manifiesto que el fondo histórico de la SMC actualmente depositado en la Biblioteca General de la UMA está constituido por los siguientes elementos: 4.275 volúmenes; 237 volúmenes anteriores a 1800 (en curso de catalogación); 144 manuscritos; 536 separatas y publicaciones de pequeño formato (de las que 413 están pendientes de catálogo); 183 revistas y publicaciones periódicas que incluyen un número no determinado de fascículos, la mayor parte de los cuales corresponden a los años comprendidos entre 1911 y 1944.

En la actualidad el fondo se incrementa permanentemente con nuevas aportaciones procedentes, en su mayor parte, de donaciones de los propios socios de la Academia y de los volúmenes que ésta recibe, fruto del intercambio de sus publicaciones con otras entidades de similares características. En este momento se encuentra catalogado en la Biblioteca General de la UMA un total de 5.245 volúmenes y otros 124 en curso de catalogación (sin incluir en estas cifras las publicaciones anteriores a 1800, los manuscritos, las publicaciones de pequeño formato y las revistas), a los que hay que añadir otros 286, pendientes de ser depositados en ella por la AMC.

Las publicaciones y documentos de este fondo están disponibles para los usuarios en las condiciones que la Biblioteca General de la UMA tiene establecidas para el resto de sus publicaciones. La AMC, con el fin de difundir lo que considera como su más preciado patrimonio, lleva acabo en los últimos años un programa de ediciones en facsímil de algunas obras singulares de esta colección.

Acceso al catálogo

09/03/2009