El curso "La ciudad como arquetipo. Literatura, historia y arte. Europa y América" organizado por el Aula María Zambrano de Estudios Transatlánticos UMA-ATECH de la Universidad de Málaga y la Cátedra Vargas Llosa, ha concluido su última jornada celebrada en el Salón de Actos del Rectorado de la Universidad de Málaga. Este seminario ha visto cumplidas sus expectativas gracias a la inscripción de más de un centenar de alumnos quienes han podido disfrutar, durante sus tres días de duración, de un extenso debate sobre las ciudades y su trascendencia en la cultura y la literatura iberoamericanas en el que el premio Nobel, Mario Vargas Llosa, ha puesto el broche de oro. El acto de clausura ha contado con la presencia de José Ángel Narváez Bueno, rector de la Universidad de Málaga; Juan Antonio García Galindo, vicerrector de Política Institucional de la Universidad de Málaga y director del Aula María Zambrano de Estudios Transatlánticos; Guadalupe Fernández Ariza, directora del curso; y Francisco de la Torre Prados, alcalde de Málaga; entre otras autoridades.

Un total de 9 expertos en la materia han aportado su perspectiva en torno al arte, la literatura y la cultura latinoamericana a través diversas ponencias y mesas redondas partiendo del paradigma de las ciudades. Así, durante el segundo día, Teodosio Fernández, catedrático de Literatura Hispanoamericana en la Universidad Autónoma de Madrid, ha reflexionado sobre "Las ciudades de Borges" afirmando que "la ciudad para cada escritor es lo que el escritor finalmente cree inevitablemente, en el caso de Borges esa ciudad es Buenos Aires". Por su parte, el catedrático de Literaturas Románicas en la Universidad de Málaga, Antonio Jiménez, se ha acercado a "La ciudad en la poesía contemporánea" con una charla en la que se ha centrado en hablar no solo de escritores o poetas sino también de pintores, dejando claro que en la época contemporánea hay una relación clarísima entre la poesía, la pintura, y la fotografía. A continuación, Guadalupe Fernández Ariza, doctora en Literatura Hispanoamericana y directora del curso,  ha confesado haber escrito tanto sobre Vargas Llosa que le costaba, a su vez, hablar sobre él. Durante su disertación "Las ciudades de Mario Vargas Llosa" centrada fundamentalmente en la conversación de la Cátedra ha establecido un preámbulo, como justificación del seminario, pasando por modelos literarios que se reflejan en la obra del autor.

La última jornada del ciclo se ha abierto con la conferencia "La ciudad como tema en la última narrativa hispanoamericana" expuesta por Fernando Rodríguez Lafuente, doctor en Literatura Hispanoamericana, quien ha revelado que hablaba "desde la condición de lector", "una condición –prosiguió– que nadie te puede arrebatar, porque uno lee lo que quiere pero no escribe lo que quiere". Fuera del programa se ha presentado el libro El arte de Juan Rulfo. Lecturas de Pedro Páramo escrito por Fernández Ariza, primer volumen de la colección Estudios Latinoamericanos de AMZET y la Cátedra Vargas Llosa, en el que la autora inicia la antología con un ensayo sobre la obra de Rulfo en conmemoración del centenario de su nacimiento. Tras esta intervención, Mario Vargas Llosa, premio Nobel de Literatura, y Juan Manuel Bonet, exdirector del Instituto Cervantes, han expuesto su visión sobre "La ciudad en la literatura y el arte", con un coloquio en el que ambos han repasado, a lo largo de casi dos horas, sus viajes a diversas ciudades, europeas y latinoamericanas, mostradas a lo largo de sus caminos en la literatura. Un ejemplo de ello ha sido París, lugar que ha servido para evocar las mejores obras y autores que han convertido a la capital en todo un símbolo dentro del arte, señalando que "mientras no exista una literatura sobre las ciudades, estas son tristes y pasajeras". Once años después de ser nombrado doctor honoris causa por la UMA, Llosa ha reconocido que ha sido un placer el hecho de que este seminario le haya permitido volver a una Universidad, de la que conserva gratos recuerdos, para reflexionar sobre urbes asociadas a la literatura y el arte. En este contexto, ha expresado que pocas ciudades se han renovado y enriquecido tanto como Málaga, gracias a los museos y las distintas propuestas culturales, algo que debe orgullecer a sus habitantes y debe servir de ejemplo a otras ciudades del mundo.  

Narváez, ha presidido el acto de clausura donde ha aprovechado para reivindicar el discurso ético de las universidades, aclarando que "estas son el espacio de la convivencia y de la creación de buenos ciudadanos, de personas que van a formar la ciudad desde los valores, la cultura, la literatura, el arte, y la creatividad. Una formación hecha desde la ética, el compromiso y el trabajo".

Esta actividad, desarrollada durante los días 17, 18 y 19 de septiembre, ha contado con la colaboración de los Vicerrectorados de Estudios de Grado, de Investigación y Transferencia, de Cultura y Deportes, y Política Institucional, el Centro Cultural Generación del 27, la Obra Social y Cultural CaixaBank, y el Ayuntamiento de Málaga.

Galería fotográfica