Finaliza el primer turno de préstamo de vehículos eléctricos en el que cuatro alumnos han sido los primeros partícipes del Estudio de Movilidad Sostenible que llevan a cabo la Universidad de Málaga, a través del Vicerrectorado de Smart-Campus, y Alphabet. Desde el 25 de septiembre hasta 22 de diciembre todos los inscritos en el proyecto (Estudiantes, PAS y PDI) disfrutarán de los automóviles durante un intervalo de tiempo de 48 horas.

El primero en llegar fue Borja Vertedor, recientemente Graduado en Historia por la Facultad de Filosofía y letras, quien recorrió algo más de 300 kilómetros durante los días que ha disfrutado de un Renault ZOE: “Ha sido una experiencia bastante satisfactoria, mejor de lo esperado. No se nota que sea eléctrico”, apuntó Vertedor. Asimismo, Borja quiso destacar la ausencia de una palanca de marchas: “la verdad que pasando de un coche de gasolina bastante antiguo a un automático eléctrico la diferencia es notable, al principio cuesta adaptarse, pero luego es muy llevadero. El joven finalmente definió su experiencia con la frase “Sin ruido la misma velocidad”.

El siguiente usuario estudia en Industriales el Grado de Ingeniería de la Energía, Jorge de Latorre, al  igual que Borja utilizó el Renault ZOE y rodó con él alrededor de 100 kilómetros: “Me ha gustado mucho la experiencia. Para moverse por ciudad es cómodo”. El joven puso la importancia de las baterías como eje fundamental para la movilidad en las próximas décadas: “Es lo que queda por mejorar, pero al final va a ser el único medio. Esto ha sido un acercamiento al transporte del futuro”.

Los dos últimos participantes, al igual que Jorge llegaron de la Escuela de Ingenierías. En este caso ambos condujeron el modelo BMW i3. Antonio Márquez estudia el Grado en Ingeniería en Tecnología Industrial y se mostró entusiasmado ante este proyecto: “Se nota que es otro tipo de conducción, incluso te mantiene más tranquilo”. Márquez le hizo al coche más de 400 kilómetros y destacó la frenada que tiene el vehículo. Asimismo, Antonio quiso subrayar la iniciativa para “ además de acercarnos al futuro lo que buscamos es ser más ecológicos. Los coches eléctricos tienen un gran potencial en especificaciones”.

Javier Marina, estudiante de Ingeniería Eléctrica, Robótica y Mecatrónica aseguró que esta iniciativa ha sido “una oportunidad inesperada que he sabido aprovechar”. Marina rodó cerca de 300 kilómetros con el modelo BMW i3: “ Es mucho más cómodo de conducir, no hace ruido y prácticamente solo tienes que utilizar el acelerador. El BMW tiene mucha potencia”. Javier se mostró optimista con respecto a los vehículos eléctricos en el futuro: “No nos queda otra alternativa que apostar por la movilidad eléctrica”.