El Consejo de Gobierno de la Universidad de Málaga, reunido hoy en sesión telemática, ha aprobado el documento que establece el ‘Marco de la UMA para la adecuación de la organización de las enseñanzas universitarias a las exigencias sanitarias motivadas por el covid-19 en el curso 2020-21’, que establece una planificación docente en la que se puede combinar enseñanza presencial con enseñanza a distancia: lo que se denomina ‘docencia bimodal’.

El documento parte de la base del “valor esencial” que supone el carácter presencial de la docencia en la Universidad de Málaga. Sin embargo, será la seguridad sanitaria la que determine el nivel de presencialidad en cada caso. Por tanto, los escenarios que se contemplan son dos: el que combina actividad presencial con docencia a distancia –utilizando medios telemáticos- y otro que se derivaría de un plan de contingencia que prevea la imposibilidad de desarrollar actividad presencial alguna.

La organización de la actividad académica del curso 2020-2021 atenderá básicamente a las directrices de las autoridades sanitarias y académicas, debido a la situación de falta de certezas y a la incertidumbre acerca de la evolución de la pandemia. El objetivo de la UMA, no obstante, es “conciliar el derecho al estudio y a obtener una formación de calidad por parte del estudiantado, así como garantizar los derechos del profesorado y del resto de los trabajadores, garantizando las condiciones de seguridad y salud laboral”.

Estrategia compartida
También se establece en el documento la necesidad de que el modelo de aprendizaje de la UMA mantenga una estrategia compartida por todos los centros y departamentos de la Universidad. Para ello, admite que el inicio del curso próximo “supondrá un esfuerzo organizativo y de coordinación por parte de los órganos y servicios responsables, así como un esfuerzo adicional de adaptación por parte de todos los sectores”.

Para afrontar la docencia bimodal, la UMA adoptará “las medidas oportunas de prevención e higiene, tanto con relación a las personas como al material que se pueda compartir (ordenadores, material de laboratorio, documentos…). Para ello se garantizará la realización de pruebas diagnósticas a su personal cuando sea necesario conforme a lo establecido por las autoridades sanitarias”, según señala el texto.

De este modo, la docencia combinada o bimodal se organizará con dos tipos de grupos: presenciales y en línea. Por lo que se refiere a las prácticas externas, podrán realizarse de forma presencial en las empresas, entidades e instituciones colaborativas que dispongan de convenio de cooperación educativa y la actividad se mantenga dentro del máximo respeto a las medidas exigidas por las autoridades competentes en cada momento.

Los trabajos de fin de estudios podrán realizarse de forma presencial si se puede. Si no, se optará por una defensa telemática. Lo mismo ocurre con las tesis doctorales.

En cuanto a los medios materiales, tecnológicos y de conectividad, la Universidad de Málaga garantizará que dispongan de ellos tanto el profesorado como los estudiantes.

Desde el equipo de gobierno de la Universidad de Málaga se subraya, en palabras del rector en el informe inicial del Consejo de Gobierno, “el comportamiento ejemplar que toda la comunidad universitaria está teniendo para adaptarse a esta difícil situación de excepcionalidad y de pandemia mundial”.