La Universidad de Málaga ha mostrado hoy en la reunión de Málaga Valley, antesala del Foro Transfiere, la oferta de la institución académica en las áreas de Robótica e Inteligencia Artificial.

Ha sido el rector, José Ángel Narváez, el encargado de mostrar los avances de la UMA en estas materias, en un acto celebrado en el Palacio de Ferias en el que también han intervenido la presidenta del Club Málaga Valley, Cristina Garmendia; el alcalde la ciudad, Francisco de la Torre, y varios representantes de empresas y organismos vinculados a la inteligencia artificial, entre ellos Elisa Martín Garijo (IBM); Robert Nable  (Interactions Company) yJuan José Casado (Sanitas).

Narváez ha explicado al auditorio que una veintena de grupos de la institución académica trabaja directamente en proyectos relacionados con la robótica. Pero ha hecho un inciso, al advertir que “si la inteligencia artificial que se desarrolla en los laboratorios no llega a la empresa, no tiene ningún sentido”.

Por eso, ha reclamado una sinergia entre la Universidad y la empresa y, lo que a su juicio también es muy importante: ha demandado la combinación de los estudios técnicos con los de humanidades. “No lograremos transformar la sociedad ni incorporar las nuevas tecnologías si no asociamos este objetivo con el enfoque humano”. Ha puesto como ejemplo las máquinas que se desarrollan para ayudar a las personas con necesidades especiales o los que se vinculan directamente a la Medicina”.

Así, los casos más emblemáticos de la Universidad de Málaga en Robótica e inteligencia artificial han sido fruto de la mezcla de varias áreas de conocimiento. Eso refuerza la tesis que indica que para producir impacto hay que tener una mente abierta y olvidar los compartimentos que imponen tanto el conocimiento como la tecnología. La Universidad trabaja para la sociedad, y ésta reclama soluciones globales a sus necesidades.

Casos concretos de este planteamiento de la UMA son el primer robot móvil de España (puesto en marcha en 1990), que se dedicó a la fumigación en invernaderos; el primer robot quirúrgico en España que se utilizó para cirugía laparoscópica o los robots de rescate que sirven para la gestión de situaciones de catástrofe.  

Otros hitos surgidos de las aulas de la Universidad de Málaga son el primer robot capaz de componer música, la robotización del brazo de los cristos que bendicen o los trabajos que se ejecutan actualmente para la Agencia Espacial Europea enfocados al desplazamiento de los vehículos espaciales.

A juicio del rector, “hay que adaptar el avance del conocimiento a las necesidades de la sociedad”. En este foro de Málaga Valley también ha recordado la importancia de la mujer en la Ciencia y ha señalado que “tenemos que aprovechar ese 50 por ciento del talento”.