Nuestra historia, en cifras

El primer curso de la UMA, 72-73, contabilizó 2.230 alumnos (en las titulaciones de Económicas, Medicina y Colegio Universitario) e impartieron docencia 203 profesores. Los datos actuales de la Universidad de Málaga hablan de 40.000 alumnos, más de 2.500 docentes y 1.700 trabajadores de Personal de Administración y Servicios. De aquellas pocas facultades se ha pasado a 18 centros propios y tres adscritos, 62 titulaciones de grado, 55 másteres universitarios y 43 programas de doctorado.

Una fotografía para el recuerdo

Ayer mostrábamos una fotografía en la que las principales autoridades de la ciudad posaban agarrados del brazo para recrear la instantánea tomada hace más de cuatro décadas, cuando el Gobernador Civil anunció la creación de una Universidad en Málaga. Hoy mostramos la imagen original, captada el 6 de noviembre de 1971. Aquel día se produjo una manifestación de agradecimiento por la noticia sobre la futura instauración de la Universidad.

Fueron tres jornadas inolvidables para la provincia. El jueves 4 de noviembre, tras una dura lucha por parte de todos los agentes sociales y culturales de la ciudad y la constancia de los procuradores en las Cortes, el Gobernador Civil lo anuncia de forma definitiva: Málaga por fin tendrá Universidad. Un día después, viernes, el Consejo de Ministros incluye la UMA en su III Plan de Desarrollo. El fin de semana la ciudad se convirtió en una auténtica fiesta, y el 6 de noviembre se produjo esta instantánea que hoy rescatamos, donde el por entonces presidente de la Diputación, Francisco de la Torre; el alcalde de la ciudad, Cayetano Utrera, y los procuradores Rafael Merino y Luis Peralta encabezan esta histórica manifestación.

50 carteles para 40 años de historia

La calle Larios, una de las más emblemáticas del Centro Histórico de la ciudad, exhibió durante el mes de noviembre el pasado, presente y futuro de la Universidad en 25 paneles a dos caras, en los que los malagueños y visitantes pudieron hacer un repaso de la historia de la institución docente.

La exposición fue inaugurada por la rectora, Adelaida de la Calle, en un acto que contó, entre otros representantes institucionales, con la presencia del secretario general de Universidades de la Junta de Andalucía, Francisco Triguero; el alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre –destacado miembro de la Asociación de Amigos de la Universidad, y José Luis Ruiz Espejo, delegado del Gobierno andaluz en Málaga. Decanos, vicerrectores, trabajadores y estudiantes de la UMA arroparon la presentación.

A lo largo de la calle peatonal se mostraron textos e imágenes de hechos destacados, centros, programas, proyectos e investigaciones que la Universidad de Málaga ha puesto en marcha en estos 40 años.

“El de hoy es un acto extremadamente emblemático, dado que hemos querido sacar a la calle lo que fue, lo que es y lo que será la Universidad en un futuro”, señaló la rectora, que animó a los malagueños a conocer la UMA desde sus comienzos y comprobar “los esfuerzos que se hicieron en su día para conseguir su creación, así como su desarrollo y su consolidación en una institución docente dinámica, de acuerdo a los tiempos y a las necesidades de la sociedad”.

Severo Ochoa y la Universidad de Málaga

Severo Ochoa nació en la localidad asturiana de Luarca, pero su relación con Málaga fue muy estrecha desde su infancia. Una afección bronquial de su madre, que requería de un clima más templado que el de Asturias para recuperarse, provocó que la familia al completo se trasladara hasta Málaga. El que posteriormente fuera Nobel de Medicina estudió en el colegio de primera enseñanza de los jesuitas, antes de matricularse en el Instituto Educativo e Instructivo, donde casualmente también fue alumno otro premio Nobel, Vicente Aleixandre.

El científico asturiano fue investido doctor honoris causa de la Universidad de Málaga el 29 de septiembre de 1987. Al acto, celebrado en el Teatro Cervantes, asistieron las autoridades académicas de la UMA y el que por entonces era alcalde de la ciudad, Pedro Aparicio. El rector, José María Martín Delgado, fue quien impuso el birrete. El discurso de Severo Ochoa, que confesó haber escrito con emoción, estuvo plagado de recuerdos de su época de estudiante. «Tengo dos patrias grandes: Estados Unidos y España. Y dos patrias chicas: Asturias y Málaga», aseguró.

El día que la UMA sopló las velas de su 40 aniversario

El pasado 13 de diciembre las instituciones malagueñas arroparon a la Universidad de Málaga. Miembros de toda la cultura y la sociedad de la localidad soplaron las velas para celebrar el cuarenta aniversario de la UMA.

Durante el acto se proyectaron varios vídeos que reflejaron el presente, pasado y futuro de la Universidad. También se entregaron tres medallas al mérito universitario, concedidas al Diario Sur (recogida por su director, Manuel Castillo), “como reconocimiento a su compromiso con la información universitaria de calidad y su decidida labor divulgadora”; la Asociación de Amigos de la Universidad, que tanto luchó por la creación de la institución docente (la recogió el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, presidente de aquel colectivo) y Joaquín Luque, ex rector de la Universidad de Sevilla y promotor, junto a la rectora, Adelaida de la Calle, del Campus de Excelencia Internacional Andalucía Tech.

También se hizo entrega de la insignia al mérito en el trabajo al Personal Docente e Investigador y al Personal de Administración y Servicios que lleva 40 años trabajando en la Universidad de Málaga.

Tras la entrega de las distinciones se proyectó un vídeo con unas palabras de Federico Mayor Zaragoza, quien en 1972, cuando se creó la UMA, era rector de Granada, ciudad de la que dependían los estudios universitarios que por aquel entonces se impartían en Málaga y que se erigió en un firme defensor de la creación de esta Universidad.

“He colmado aquí mis aspiraciones personales y profesionales, soy militante activa del movimiento universitario y mi ideología entronca con la defensa de la Universidad pública. No tengo más aspiraciones, pero sí una clara vocación: defender los derechos y las libertades públicas y, sobre todo, la libertad de expresión y la autonomía universitaria”, concluyó Adelaida de la Calle su intervención en el acto.