DESPEDIDA A UN SER QUERIDO. (08/02/2022)

“Algo se muere en el alma cuando un amigo se va, dejándonos una huella que no se puede borrar”. Algunas veces el dolor de perder a alguien extraordinario es tan inmenso que no hay palabras para describirlo. A nosotros hoy nos cuesta.  ¡Juan Luis, eres único!

Llegaste a la UMA hace 32 años, a los Cursos de Español de donde ya nunca quisiste salir. Todos recordamos tu vitalidad, tu recibimiento y calurosa acogida. Durante todos estos años, alumnos y compañeros hemos sentido tu cariño, amabilidad, apoyo, consejos….

Cuánto hemos aprendido de tu sabiduría, de tus extensos conocimientos, eres y serás para siempre “nuestra enciclopedia andante”. El mejor narrador de historias y viajes, contador de chistes y anécdotas. Cuantas curiosidades compartidas, ya te extrañábamos mucho desde que te ausentaste, pero ahora será aún más.

El Centro Internacional de Español no volverá a ser lo mismo sin ti. Aunque no estés físicamente, siempre vivirás en nuestros corazones. Una persona tan buena, generosa y maravillosa nunca se olvida.

Desde que recibimos el triste desenlace, algunos hemos recordado las mejores vivencias junto a ti, tu eterna sonrisa, tu constante alegría, tu inagotable buen humor a pesar de los reveses de la vida, tu fuerza y lucha para seguir adelante, tu ser positivo.

Cuando la vida te separa de un ser querido, de un amigo, de un compañero como tú, afloran los recuerdos de todo lo vivido, tantos momentos, tantas risas, nunca un mal gesto. Tu gran humor e imborrable sonrisa es el mejor recuerdo de tu presencia en nuestra vida. No te quedarás en el olvido, siempre estarás con nosotros: un ser tan bondadoso, maravilloso y único no se puede olvidar jamás.

En uno de tus últimos mensajes decías que recibir nuestras muestras de apoyo, ánimo y fuerza era “un chute de energía “. Textualmente: “…hay una cosa con la que me siento afortunado y privilegiado. No sabía hasta qué punto y es con vosotros, es que es alucinante, como cuando uno se pone una transfusión de sangre, pues así me llega la energía vuestra, de verdad. Gracias de todo corazón.”

Y nosotros damos gracias a la vida por ponerte en nuestro camino. Descansa en paz.

Como dice el poema:

Puedes llorar porque me he ido,
o puedes sonreír
porque he vivido;
puedes cerrar los ojos
y rezar para que vuelva,
o puedes abrirlos y ver todo
lo que he dejado.

Tu corazón puede
estar vacío
porque no me puedes ver
o puede estar lleno
del amor que compartimos.

Puedes llorar,
cerrar tu mente,
sentir el vacío y dar la espalda,
o puedes hacer lo que
a mí me gustaría:
Sonreír, abrir los ojos,
amar y seguir.