Poesía, literatura y periodismo. Los tres pilares en los que se asienta la extensa y valiosa obra de Francisco Umbral fueron el objeto de debate de la mesa redonda que acogió ayer el salón de actos del Rectorado, donde diferentes estudiosos del afamado autor madrileño se dieron cita para profundizar en su legado. Se trata de una actividad organizada bajo el marco de la exposición “Francisco Umbral: libro a libro”, una muestra itinerante que estos días ha hecho parada en el Rectorado de la UMA para repasar de manera visual y didáctica la vida y obra del genial autor, desde su nacimiento a principios de los años treinta hasta la concesión del premio Cervantes.

El profesor de Periodismo de la UMA Bernardo Gómez moderó el encuentro, acompañado de destacadas figuras de las letras malagueñas, como el escritor Antonio Soler y el director de Diario Sur, Manuel Castillo, además de representantes del ámbito cultural y universitario, como la catedrática Fanny Rubio, amiga personal de Umbral, el doctor en Literatura Guillermo Laín y el vicerrector de Estudios de Posgrado, Gaspar Garrote. La charla también contó con la presencia de María España, viuda de Francisco Umbral, que siguió atenta el acto desde su butaca, rodeada de muchos estudiantes que también acudieron a la cita.

Especialista en el doble sentido, amigo de inventar palabras y gran amante de Mariano José de Larra, Francisco Umbral se convirtió en el protagonista absoluto del acto, concebido para rendir honores a una figura tan respetada como controvertida que será recordada por su imponente carácter y su destreza para la escritura, sin miedo al papel en blanco, como apuntaron los diferentes participantes anoche en sus intervenciones. Tras el saludo de Ana Valencia, directora de la Fundación Francisco Umbral, cada uno de los seis expertos que compusieron la mesa ofrecieron su visión acerca de la carrera del escritor. Gómez destacó su aportación como columnista, un género periodístico al que se entregó por completo llegando a escribir en su paso por diferentes cabeceras nacionales de renombre, como El País o ABC, una columna diaria, hasta sumar un total de once mil piezas con su firma. En la misma línea apuntó Rubio, que puso de manifiesto la calidad literaria de esos textos, fusionando las dos disciplinas que tan bien dominaba Umbral.

Por su parte, el director de Sur quiso desdoblar la figura del ganador del premio Nadal por ‘Las Ninfas’ distinguiendo entre persona y personaje, al tiempo que mencionó algunas las frases más famosas pronunciadas por el poeta, por las que adquirió relevancia mediática. Laín, cuya tesis doctoral gira en torno a Umbral, se centró en recitar una selección de sus poemas y artículos, incluyendo además algunos con referencia directa a personajes del ámbito político malagueño, como la exalcaldesa popular Celia Villalobos o el expresidente del Atlético de Madrid y exalcalde de Marbella, Jesús Gil. Tomó el turno de palabra entonces Gaspar Garrote, precisamente director de la tesis de Laín, quien rememorando su época de estudiante en la capital, concedió a Umbral el mérito de inculcar a los jóvenes el gusto por leer la prensa, haciendo el “acto subversivo” de comenzar a revisar el periódico por el final para encontrarse primeramente con la columna que él publicaba. Y cerró la ronda de intervenciones Antonio Soler, premio Francisco Umbral, que subrayó el talento creador de Umbral, autor de más de un centenar de libros, acordándose también de otro articulista a quien el autor madrileño admiraba profundamente, el recientemente desaparecido Manuel Alcántara.