La pista central del Complejo Deportivo Universitario de Teatinos se ha transformado por unas horas en un gran centro de formación muy especializada. A lo largo de la mañana, alrededor de 1300 alumnos de secundaria y bachillerato de 15 centros de la capital y la provincia han recibido una formación específica y especializada sobre los primeros auxilios que debemos prestar a una persona que sufra una parada cardiopulmonar hasta la llegada de los servicios de emergencia. Las clases prácticas impartidas por personal cualificado de las instituciones organizadoras del evento han dado una clase muy práctica intensiva a grupos de 10-15 jóvenes. Los estudiantes han podido poner en práctica las técnicas aprendidas en alguno de los 40 maniquíes que se han distribuido por el pabellón. El objetivo final de esta jornada es facilitar a los jóvenes las técnicas suficientes para hacer realidad el lema de la jornada: “Tus manos pueden salvar una vida”
Esta sesión de formación multitudinaria  para conmemorar el Día Europeo de concienciación ante la parada cardiopulmonar ha sido coorganizada por la UMA y las delegaciones provinciales de las consejerías de Salud y de Educación, el Colegio de Médicos y la Empresa Pública de emergencias Sanitarias 061, que ha asumido la coordinación del proyecto. La creación del Día Europeo de la Parada Cardiaca es una iniciativa del Consejo Europeo de Resucitación Cardiopulmonar.
Durante el segundo turno de formación, visitó el pabellón el delegado provincial de Salud de la Junta de Andalucía, Daniel Pérez, que fue acompañado en su visita por la directora del servicio de emergencias del 061, Auxiliadora Naranjo; el director de Deportes de la UMA, Pedro Montiel y el director de la escuela de RCP del Colegio de Médicos, Andrés Buforn. Daniel Pérez explicó que “las recomendaciones internacionales indican que una de las estrategias dirigidas a disminuir la mortalidad de los pacientes que han sufrido una parada cardiorrespiratoria es enseñar a la población en general las medidas básicas que deben aplicar a estos pacientes mientras llegan los equipos sanitarios, y que han demostrado que aumentan la supervivencia en estos casos”.
Cada año, en España se producen en torno a 25.000 paradas cardiacas extra-hospitalarias. Esta patología afecta a una población con una edad media en torno a los 60 años y, en muchos casos, es la primera manifestación de una enfermedad cardiaca silente hasta ese momento. La supervivencia de mucha de las víctimas depende de que se aplique la RCP en los primeros 3 ó 4 minutos, lo que puede aumentar las posibilidades de supervivencia en más del 50% de los afectados.
Esta realidad ha impulsado una resolución del Parlamento Europeo que en junio de 2012 aprobó una declaración en la que pedía a la Comisión y al Consejo Europeo que adopten y trasladen a los países miembros una serie de medidas para mejorar la atención y los resultados de la RCP en Europa. El Consejo Europeo de Resucitación Cardipulmonar ha calculado que más de 100.000 personas al año podrían salvar sus vidas en Europa si se alcanzaran las tasas de formación de ciudadanos en estas técnicas que tienen en países referentes como Países Bajos o Suecia.
Estos eventos suceden en la calle, en el trabajo, mientras se hace ejercicio o una actividad extenuante, aunque en la mayoría ocurren en el hogar. En la actualidad, menos de 1 de cada 10 personas sobreviven. Las investigaciones realizadas muestran que la aplicación de las técnicas de reanimación cardiopulmonar por un testigo de la parada cardiaca aumenta la supervivencia entre 2 y 3 personas de cada 10, aunque sólo 1 de cada 5 pacientes llega a recibir esta ayuda.

Técnica de reanimación cardiopulmonar
La parada cardiopulmonar es la interrupción brusca, generalmente inesperada y potencialmente reversible de la respiración y la circulación espontáneas. Una recuperación del paciente sin secuelas neurológicas exige que los tiempos de actuación sean mínimos. En este punto, la colaboración ciudadana, el aviso y el inicio inmediatos de maniobras de reanimación son imprescindibles para conseguir un buen resultado final. La técnica de reanimación cardiopulmonar consiste en el mantenimiento de la vía aérea abierta, de la respiración y de la circulación de la sangre, sin equipo específico, sólo utilizando las manos y la boca, pudiéndose usar dispositivos de barrera para la vía aérea, evitando así el contacto directo con la víctima.
Durante las sesiones formativas, los asistentes han podido poner en práctica los consejos y recomendaciones de los profesionales sanitarios para realizar la reanimación cardiopulmonar sobre maniquíes o pacientes simulados, al tiempo que han conocido la secuencia de actuaciones que determinan un aumento de la supervivencia tras sufrir una Parada Cardiorespiratoria (PCR), lo que se ha llamado la ‘Cadena de Supervivencia’.
Esta cadena consta de cuatro eslabones bien diferenciados y todos a su vez imprescindibles. En primer lugar hay que alertar con rapidez al servicio de emergencias sanitarias llamando al número 061, para posteriormente comenzar con las maniobras de reanimación cardiopulmonar básica (RCP) de forma eficaz y hasta que llegue el equipo sanitario que atenderá al paciente. En tercer lugar se efectuará la desfibrilación precoz,  que se refiere al tratamiento eléctrico de la arritmia que ha producido la parada. Por último el equipo de emergencias sanitarias realizará la asistencia y traslado al hospital correspondiente.

El servicio de Deportes y la RCP
El servicio de Deportes de la UMA, que ya celebró el pasado mes de junio el I Maratón de RCP en colaboración con el Colegio de Médicos, es pionero en la adopción de medidas para la reducción de los riesgos de parada cardiopulmonar, tanto técnicas (con la adquisición de desfibriladores), como humanas (con el equipo médico y la formación de todo el personal de Deportes) y de divulgación, como esta jornada y el maratón RCP. “Desde el servicio de Deportes – explicó Pedro Montiel- hemos apostado por tratar de mejorar la calidad de vida de las 45.000 personas que formamos la comunidad universitaria, para lo que hemos puesto en marcha el programa “UMA saludable” en el que tienen perfecta cabida estas actividades de difusión de unas técnicas básicas que pueden salvar muchas vidas”. Antes de finalizar la visita del delegado al Complejo Deportivo, el director de Deportes le mostró las nuevas instalaciones médicas del pabellón reformadas dentro del programa UMA saludable y las cinco columnas con desfibriladores que se han instalado en distintas dependencias de la instalación. 

16-10-2013