La Escuela, de reciente creación (2012) es un concepto muy nuevo en España, aunque no tanto en el extranjero, especialmente en las universidades europeas. Entre sus funciones principales se encuentra la coordinación de los programas de Doctorado de la UMA y la planificación de la oferta de actividades colaterales a la formación de calidad de los doctorando.

Hasta ahora se había encargado del proyecto el director del Centro Internacional de Posgrado, Antonio Vallecillo, y, una vez realizada ya la regulación, con el reglamento y la articulación de estos estudios en la UMA, el testigo pasa a Muñoz Chápuli, que lo recibe “con responsabilidad e ilusión”.
 
En la UMA existen 20 programas de doctorado adaptados al nuevo decreto vigente, que representan todas las grandes áreas del conocimiento. Cada uno de ellos tiene una serie de actividades previstas  que son específicas, como en el caso de los programas de doctorado de las ingenierías, psicología o ciencias. Pero también hay actividades de interés general para todos los alumnos al margen de su área de estudio, como el análisis de datos o cursos de idiomas, entre otras actividades que la Escuela tratará de ofrecer.

Además, la nueva concepción de los programas de Doctorado exige una mayor aplicación y dedicación por parte del alumno que antes no existía. De hecho, serán evaluados todos los años.

De acuerdo con su reglamento, además de la figura del director, se establece la creación de un comité de dirección. Actualmente, está en proceso de creación y se formará con los 20 coordinadores de los programa de doctorado, representantes de entidades colaboradoras, de centros de investigación que colaboran con los programas de doctorado, organismos públicos de investigación de Málaga, representantes de los alumnos y del Personal de Administración y Servicios. «Se está a la espera de la representación de los alumnos, y la designación de entidades colaboradoras. La intención es que algo más de un mes se pueda constituir el comité», señaló el director.

Objetivos
Entre las principales líneas de trabajo, Muñoz-Chápuli dará prioridad a la internacionalización para que los doctorandos de Málaga salgan a los grandes centros de investigación, «porque es bueno para su formación, pero también para la propia UMA, ya que se crean vínculos de colaboración con proyectos comunes a escala internacional». También se prestará especial atención a la colaboración con empresas. Un doctorando puede estar interesado en realizar una parte de su tesis en una empresa del entorno, creando un vínculo entre ambos que a lo mejor en el futuro puede acabar en contrato.

Para todo ello ya se está buscando la fórmula con ayudas e incentivos que hagan atractivo a las empresas tener incorporado un investigador en su plantilla.

Como novedad, hace tan solo unas semanas, la Escuela de Doctorado puso en marcha un blog con el propósito de servir de vía de comunicación entre todos los implicados en los programas de doctorado de la UMA, en donde se recogen todas las convocatorias de ayudas, noticias, novedades sobre las tesis y la oferta de actividades que se vayan organizando durante el curso.