Marion Reder Gadow, catedrática de Historia Moderna de la Universidad de Málaga y licenciada en Historia de América por la Universidad Complutense de Madrid, ha ingresado como académica de número de la Academia Andaluza de la Historia ‘Ortiz de Zúñiga’, en un acto celebrado el pasado sábado en la Antigua Diputación de Málaga.

Reder, cuyas principales líneas de investigación versan sobre Historia de América, de Málaga, de las Mentalidades, de la invisibilidad de la mujer y su formación intelectual, de las Instituciones, Norte de África, Guerra de la Independencia e Historia Militar, pronunció un discurso titulado ‘La huella de Málaga en la Universidad Complutense de Alcalá de Henares, que fue contestado por el también catedrático de Historia José Calvo Poyato.

El discurso de la nueva académica de número se versó en un hecho histórico que se remonta al siglo XVI, cuando el regidor malacitano Juan de Berlanga Maldonado dispuso la fundación de un Mayorazgo, vinculando a éste parte de sus bienes y dejando estipulado que, en caso de extinguirse la línea masculina, se dedicasen sus fondos a la creación de un Colegio Universitario en Málaga similar al de Osuna, en el que se formarían juristas, médicos y humanistas.

Por diversas circunstancias este ambicioso proyecto no se pudo materializar y los jóvenes malagueños que pretendían seguir su formación universitaria se veían obligados a desplazarse a Granada, Salamanca o Valladolid. A comienzos del siglo XVII, Juan Alonso Moscoso, obispo de la diócesis de Málaga, inspirándose en el deseo del regidor Berlanga, fundó en la Universidad de Alcalá de Henares un colegio que permitía a jóvenes con escasos recursos económicos alcanzar una titulación académica.

El proyecto materializado del obispo malacitano aún pervive en el urbanismo de la Complutense, como sede de la actual Facultad de Filosofía y Letras, y sus paredes recuerdan la huella de Málaga con los nombres de sus santos titulares: Ciriaco y Paula.