Aníbal Ollero Baturone, catedrático de la Universidad de Sevilla y el investigador con más artículos publicados a nivel mundial relacionados con vehículos aéreos no tripulados y con robótica aérea, ha sido investido hoy como doctor honoris causa por la Universidad de Málaga.

La ceremonia ha seguido todos sus pasos protocolarios. Presidida por el rector, Teodomiro López, el honor de ser su padrino ha recaído en el catedrático Ingeniería de Sistemas y Automática de la UMA Alfonso García Cerezo. Ambos le han hecho entrega a Ollero de los atributos y símbolos que reconocen sus méritos para ser doctor honoris causa, como el birrete laureado, el Libro de la Ciencia, el anillo, los guantes blancos y la medalla doctoral.

La investidura ha contado con la asistencia de un nutrido grupo de representantes académicos e institucionales, con el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, a la cabeza, así como los ex rectores Adelaida de la Calle y José María Martín Delgado y el director general de Málaga Tech Park, Felipe Romera, que también es doctor honoris causa por la Universidad de Málaga. La ambientación musical ha corrido a cargo del Cuarteto ‘Galamian’.

 

Aníbal Ollero es un referente mundial en el campo de la Robótica aérea. Actualmente dirige el GRVC (Robotics, Vision and Control Research Laboratory) -con más de 75 miembros de la Escuela de Ingeniería de Sevilla- e integra la Asociación para la Investigación y la Cooperación Industrial de Andalucía (AICIA). También es director científico del Centro Avanzado de Tecnologías Aeroespaciales (CATEC), con más de 130 componentes. 

Grupo de investigador líder en su campo
Su grupo es líder en robótica aérea. Ha participado en más de 190 proyectos de investigación y desarrollo, incluyendo 45 financiados por la Comisión Europea, así como otros auspiciados por la NASA, distintos programas nacionales de investigación (80) y otros regionales. Además, ha sido investigador principal en más de 50 contratos con industrias.

Ha presentado resultados en más de 900 publicaciones. Autor o coautor de 11 libros, ha supervisado más de 55 tesis doctorales, entre ellas la de su padrino en la ceremonia, Alfonso García Cerezo, quien ha destacado también su fuerte vinculación con Málaga. De hecho, fue el primer director de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales, germen -junto a la Politécnica- de la actual Escuela de Ingenierías Industriales.

Yendo más al contenido de su trabajo, cabe destacar que Ollero ha desarrollado métodos, tecnologías y aplicaciones en sistemas aéreos no tripulados, robótica, control y sistemas autónomos en general, incluyendo los primeros robots inteligentes de alas batientes con capacidad de posado y manipulación. Asimismo, ha construido robots aéreos con capacidad de locomoción terrestre para la inspección y el mantenimiento de infraestructuras, incluyendo líneas eléctricas y tuberías elevadas.

Ha recibido una treintena de premios y distinciones entre los que destacan el Overall ICT Innovation Radar Award -que le otorgó la Comisión Europea en 2017-, el premio Rey Jaime I en Nuevas Tecnologías (2019), donde el jurado señaló “su inestimable capacidad para combinar la excelencia en la investigación y la innovación tecnológica, con la transferencia de tecnología a las empresas en el campo de la robótica aérea” y el Premio Nacional de Investigación Leonardo Torres Quevedo, en 2021. 

Trabajos
Explicados los méritos, y “coronado” ya con el birrete, el profesor Ollero ha realizado una exposición de algunos de sus trabajos, en una charla titulada ‘Robots aéreos bio-inspirados y deformables’ en la que ha dejado claro su liderazgo en la materia.

Por su parte, el rector ha señalado que el reconocimiento que hoy le otorga la Universidad de Málaga “no solo rinde homenaje a una trayectoria ejemplar, sino que también refleja el firme compromiso de nuestra institución con los grandes desafíos científicos, tecnológicos y sociales de nuestro tiempo”.

La vinculación de Ollero con la ciencia aglutina, según Teodomiro López, “muchos de los valores que aspiramos a fortalecer como universidad: excelencia académica, ambición para innovar y responsabilidad social”. “Su persona y su carrera -ha continuado el rector- hacen que la robótica y los sistemas automáticos se conviertan en herramientas transformadoras, puestas al servicio de las personas y orientadas a construir un futuro más seguro”.

“De sus laboratorios no solo han salido drones inteligentes: han nacido verdaderas soluciones al servicio de la sociedad sistemas capaces de intervenir en incendios forestales, localizar víctimas en entornos extremos o colaborar en la reforestación de áreas devastadas”, ha añadido, al tiempo que ha valorado la capacidad del nuevo doctor honoris causa para hacer una ciencia que no se limita al mero descubrimiento, “sino que se conjuga con el deber de proteger, prevenir y mejorar nuestras vidas”. 

Por último, el rector también ha alabado la labor de los grupos de investigación de la Escuela de Ingenierías Industriales de Málaga y ha considerado que le incorporación del doctor Ollero al Claustro de la UMA “es una magnífica oportunidad para abrir nuevas vías de colaboración y de construcción de nuevas soluciones compartidas”.

Las palabras del rector han dado paso al cierre de la ceremonia de investidura, amenizada musicalmente por el cuarteto de cuerda ‘Galamian’, que ha interpretado la ‘Zarabanda Académica’, el ‘Canticorum Jubilo’ y, por último, el tradicional ‘Gaudeamus Igitur’, con el que se ha activado la procesión de doctores para abandonar el Salón de Actos del Rectorado.

Laudatio

Discurso rector